La Asociación Nacional de Comerciantes de Vehículos (Ancove) reclama al Gobierno un plan para acabar con los vehículos diésel más antiguos, que son los más contaminantes.
Ancove ha hecho partícipes de este plan a la DGT, al Ministerio de Industria y al presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). El objetivo, que fue fijado a finales del pasado año, es fomentar la sustitución de los turismos diésel de más de nueve años por otros de no más de cuatro.
Según la propuesta de la asociación, las ayudas podrían regularse de manera que fueran proporcionales a la antigüedad del coche. Los que tengan 12 años o más recibirían 500 euros del erario público, y los de nueve, 300. A esto se sumaría un descuento por parte del vendedor de 150 euros.
El motivo de este plan es que la mala calidad del aire en algunas ciudades españolas acabará limitando la circulación de los vehículos más contaminantes (de hecho, en Madrid ya se están llevando a cabo regulaciones al respecto y esto afectará especialmente a los diésel más antiguos. Sin embargo, ‘muchos de los propietarios de estos turismos tienen unas condiciones económicas precarias. De no ser así, cambiarían de coche’. Estos propietarios, incluso con el plan PIVE, ‘son incapaces de hacer frente a un coche de primera mano’, señala la asociación.
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