Repasamos los vehículos más emblemáticos de España en el siglo XX. Son historia viva del automovilsimo en nuestro país y seguro que habrás conducido alguno.
Hoy te traemos un artículo recopilatorio con los coches más importantes y emblemáticos del panorama español durante el siglo XX, para que recuerdes lo que se sentía en esos interminables viajes por carretera en vacaciones sin aire acondicionado, sillitas para los niños, ni cinturones de seguridad.
La mayoría de estos modelos son ya clásicos, aunque todavía podemos ver muchos circulando por las calles o en las concentraciones de coches antiguos. Si la nostalgia te embarga, quizá puedas encontrar alguno a la venta en nuestra sección de coches de segunda mano.
Años 60
Seat 600
El 27 de junio de 1957 comenzó la fabricación en España del Seat 600 y, con ello, el inicio de la motorización masiva en nuestro país. El Seat 600 es, sin duda, uno de los coches más importantes de la historia de España y todavía, hoy en día, son muchas las personas que los guardan como verdaderos tesoros.
Diseñado por el italiano Dante Giacosa (Fiat), el Seat 600 fue todo un éxito dentro del mercado de automóviles y supuso el primer coche para muchas familias españolas. El Seat 600 medía 3,21 m de largo que incluía dos franjas cromadas a los lados, elevalunas con manivela, un habitáculo en el que se supone que cabían perfectamente 4 personas e incluso 5 si íbamos más apretados (aunque en la práctica se metían muchas más) y un ya mítico maletero de 68,5 litros. Su precio era de 65.000 pesetas de aquella época. Aquí repasamos la historia del Seat 600.
Entre las peculiariedades mecánicas del Seat 600 estaba un motor de 633 cc de cilindrada y 18-20 CV de potencia. Su consumo en ciudad era 10 l/100 km y por carretera de 6,5l/100 km con autonomía para 461 km. El 600 tenía una buena robustez y su reparación era bastante fácil, ya que su mecánica era sencilla y accesible. Además, había repuestos en casi todas partes, lo que hacía que durara años y años.
Citroën 2CV
El Citroën 2CV (Deux Chevaux Vapeur) fue uno de los coches de mayor éxito comercial y con mayor legión de seguidores en todo el mundo. Su asequible precio y su sencilla construcción fueron algunas de las claves de su éxito. De hecho, desde 1948 hasta 1990 se fabricaron más de 5 millones de unidades. Puedes repasar su historia en este artículo.
El vehículo que medía 3,86 m de largo x 1,48 m de ancho y 1,60 m de alto, con una distancia entre ejes de 2,27 m. La configuración mecánica del Citroën 2CV era bastante sencilla. Los primeros modelos contaban con un motor de 375 cc y 9 CV, con dos cilindros opuestos que eran refrigerados por aire y un radiador de aceite. Todas estas peculiaridades técnicas se escondían en un coche de pequeñas dimensiones y ligero peso, capaz de llegar a cualquier sitio.. . incluso en la actualidad.
La popularidad y la fama de los coches a nivel mundial crece aún más si el modelo en cuestión ha aparecido en alguna película y el Citroën 2CV es un buen ejemplo de ello. Así, por ejemplo, lo pudimos ver en películas de la talla de 007, For Your Eyes Only (Sólo para sus ojos) o en algunas españolas como la ya mítica, Sor Citroën.
Simca 1000
SIMCA son las siglas de Société Industrielle de Mecanique et de Carosserie Automobile (Sociedad Industrial de Mecánica y Carrocería del Automóvil) y, a pesar, de que es el nombre de una compañía típicamente francesa, lo cierto es que fue fundada por el italiano Henri Téodore Pigozzi.
A principios del años 60, a nadie le importaba el consumo o la aerodinámica de los turismos y los coches cuadrados empezaban a ser el último grito en cuanto al diseño de los automóviles. De esta manera, en el Salón de Paris de 1961, fue presentado por primera vez el Simca 1000 Barreiros, un turismo de cuatro puertas, con frenos de tambor, dirección tipo Gemmer (tornillo sin fin y rodillo), con una distancia entre ejes de 2,18 m, una longitud de 3,78 m y una anchura de 1,47 m. El motor original era de 944 cc y 52 CV de potencia. La principal novedad con la que contaba -aparte de su diseño más cuadrado que la mayoría de los coches que había por aquel entonces- era que incorporaba el motor en la parte trasera en lugar de la delantera.
Si el Citroën 2CV se hizo famoso por su aparición en varias películas, en los años 80, el Simca 1000 se popularizó gracias al éxito de la canción Qué difícil es hacer el amor en un Simca 1000, del grupo musical español Los inhumanos.
Años 70
Ford Fiesta
A finales de 1973, acuciados por la crisis del petróleo que aconsejaba la incorporación de un coche pequeño y económico dentro de la gama europea, y también por la elevada demanda de este tipo de automóviles, Henry Ford II y su Comité de Dirección tomaron la decisión de iniciar el diseño y la fabricación de un coche que, con el tiempo, se convertiría en un fenómeno de masas del que se han vendido hasta la fecha más de 12 millones de unidades.
La primera generación del Ford Fiesta fue lanzada en el verano de 1976. Equipado con un motor 1.0 L de 40 CV, destacaba por ser un coche ligero, aerodinámico y tener un precio particularmente competitivo. Su consumo era de 5,6 l/100 km a 90 km/h y 7,9 litros en conducción urbana. El Ford Fiesta contaba con una caja de cambios de 4 velocidades, suspensión McPherson, frenos de disco delantero y eje rígido y frenos de tambor atrás, dirección de cremallera y carrocería de tres puertas que ofrecía confort y amplitud a los pasajeros.
Con este modelo, la compañía estadounidense había creado un gran automóvil de tracción delantera con el motor instalado en posición transversal, un diseño de carrocería con un amplio maletero. También unos niveles de calidad y fiabilidad mecánica desconocidos hasta ese momento entre los modelos más populares, potenciado por unas cualidades aerodinámicas hasta entonces exclusivas de los coches de categorías superiores.
Renault 5
Como vimos en la historia del Renault 5, este popular urbano apareció por primera vez en 1972, bajo la denominación de Supercar. Su diseño más moderno y original, junto con sus formas redondeadas, supusieron una verdadera revolución.
La desaparición de las empuñaduras de las puertas y los paragolpes de poliéster integrados en una nueva carrocería monocasco, fueron toda una ruptura con los moldes estéticos más comunes en aquella época. Además, el Renault 5 apostaba por una carrocería de dos puertas, algo que inicialmente despertó cierto escepticismo al tratarse de un coche familiar, pero que con el tiempo resultó ser todo un acierto ya que dotaba al coche de un gran volumen interior (tenía espacio suficiente para 4 personas). El aspecto del R5 era magnífico gracias a con su diseño más compacto e ideal como coche para la ciudad gracias a sus 3,5 m de largo x 1,52 m de ancho.
El primer R5 que se comercializó contaba con un motor de 782 cc y 36 CV, el mismo motor que llevaba su predecesor, el Renault 4. El éxito inicial del Renault 5 superó todas las previsiones y fue el coche más vendido en Francia durante 10 años seguidos (1974-1983).
Años 80
Seat Ibiza
Seat ha sido el santo y seña del automovilismo en este país, la compañía que motorizó España con el 600 y uno de los grupos automovilísticos más potentes del mundo. El Seat Ibiza se ha convertido enel coche más vendido en España y también el más exportado de la historia. El año pasado la compañía celebró los 30 años desde su lanzamiento.
La primera generación del Ibiza nació en 1984, convenientemente acortado en su distancia entre ejes y puesto al día en lo que a suspensiones y dirección se refiere. Era un utilitario sin electrónica de ningún tipo, sin aire acondicionado y con un habitáculo con asientos sencillos y un salpicadero de plástico duro donde destacaba el diseño por “satélites” (mandos tras el volante que eliminaban las tradicionales palancas de luces y limpiaparabrisas), pero con una estética visualmente atractiva, moderna para aquella época y que gustó de inmediato.
Además, tenía un nombre que generaba “buen rollo” y que inmediatamente recordaba a conceptos como fiesta, optimismo, verano o juventud. Un nombre que, además, se hizo muy conocido en toda Europa y que sonaba bien en todos los idiomas. Su oferta de motorizaciones iba desde los 44 CV hasta los 100 CV en gasolina, con un propulsor de 55 CV diésel. El precio aproximado del Seat Ibiza en 1984 era de 825.000 pesetas.
Volkswagen Golf
Uno de los coches más vendidos de la historia del automóvil y el más conocido dentro de la marca Volkswagen, con permiso del Beetle. En 1974 comenzó la historia del Golf convertido ya en mito, que ha vendido más de 30 millones de unidades en sus 40 años de vida. H aocntado con multitud de variantes mecánicas (entre las que destaca el exitoso Golf GTI) y de carrocería a lo largo de sus siete generaciones.
En 1983, se presentó la segunda generación, la de su confirmación. Incluía modelos un poco más grandes (3,98 metros), con motores más potentes, alcanzando en la variante deportiva GTI los 112 CV con su motor de 1,8 L. Los detalles estéticos, como el doble faro del frontal y la introducción del sistema de frenos ABS, causaron una gran sensación en la década de los 80.
Opel Kadett
En 1984 se presentó el Opel Kadett E, siendo el último compacto de Opel con este nombre, ya que su sustituto pasaría a denominarse Astra. El Kadett se caracterizaba por una línea más aerodinámica que la de sus predecesores y pronto se convirtió en uno de los modelos más importantes de la compañía.
Fue la más conocida y popular de todas las generaciones del Kadett. Se fabricaron en total 3,8 millones de unidades en sus más de nueve años de vida, figurando siete variantes de carrocería: dos volúmenes de tres y cinco puertas, familiares de tres y cinco puertas, un comercial, un sedán y un descapotable.
Desde el mismo momento en que se presentó, Opel ya contaba con una versión deportiva conocida como Opel GSI, que contaba con un motor 1.8i y una mecánica multiválvulas con 115-150 CV. Rápidamente se convirtió en un referente del segmento y durante un tiempo, el Opel Kadett fue el coche más potente de todos los de su categoría.
Años 90
New Beetle
La compañía alemana supo reinterpretar este clásico del Volkswagen Escarabajo, con el que no compartía elementos estructurales ni mecánicos, creando un nuevo modelo de estilo retro o vintage. Nació en 1998 y ofrecía carrocerías de tipo coupé y cabriolet, con dos puertas. El New Beetle fue un coche moderno en todos los sentidos: tracción delantera y motor delantero que se refrigeraba con agua, faros inclinados, luces traseras redondas y un techo redondeado de gran altura, que hacía del New Beetle un coche seguro, rápido, de potente motor y alto rendimiento.
A partir de las líneas y la estructura del antiguo escarabajo, los primeros modelos contaban con motores de gasolina con cuatro o cinco válvulas por cilindro y un único modelo Diésel de 1.9 L de 100 CV. Sus ventas no fueron muy importantes en volumen… pero
Renault Clio
El Renault Clio es uno de los coches más importantes de la gama Renault junto con el Mégane. Se empezó a comercializar en 1990 como sucesor del Renault Supercinco. Este nuevo vehículo de Renault fue el primero en estrenar en Europa una nueva nomenclatura, cambiando su denominación numérica por una nominal. Además, usó el nombre de Clio en alusión a la musa griega y de la poesía heroica.
El Renault Clio disfrutaba de unas líneas generales mucho más trabajadas y redondeadas que el resto de modelos de la marca, con unos ejes muy próximos a las esquinas que hacía que sus ocupantes disfrutaran de una mayor habitabilidad interior. El primer modelo se comercializó en versiones de 3 y 5 puertas y tuvo una gran demanda, ya que se trataba de un vehículo pequeño pero que, sin embargo,incorporaba tecnología punta, con un salpicadero revolucionario. Además, se podía encontrar con motores muy diferentes, todos de cuatro cilindros.
El modelo más equipado, el Renault Clio RT, disponía de una serie elementos rara vez vistos en su categoría como: elevalunas eléctricos, cierre centralizado, asientos traseros partidos, faros antiniebla y un completo equipo de sonido. Todas estas características le llevaron a ganar varias veces el premio al mejor coche del año.
Peugeot 205
El inolvidable Peugeot 205: contigo al fin del mundo
1.9 GTi
1.3 Rallye
Si hay un coche que tiene un hueco especial en el corazón de los fans de Peugeot es, sin duda, el Peugeot 205. En torno a sus 3,7 metros de largo por poco más de 1,5 metros de ancho se han creado numerosos clubs de fans que lo idolatran con pasión. Treinta años después de su salida al mercado, aún se guarda un cariño único, un aroma a primer amor, una sensación de diversión que muy pocos coches han sabido reproducir.
El Peugeot 205 fue el quinto de una larga y exitosa saga: la serie 200, cuyo último vástago llega a nuestros días con el Peugeot 208. El objetivo de Peugeot era claro: dominar el segmento B de los pequeños utilitarios. Y no sólo lo lograron, sino que crearon una leyenda que, a día de hoy, aún es recordada como un mito.
Todo comenzó a finales de los años 70. El Peugeot 104 había sido todo un éxito, pero era necesaria una actualización para fidelizar a una clientela que, a sabiendas de la calidad que ofrecían los Peugeot, cada vez se mostraba más exigente. Así nació lo que se vino a conocer después como ‘proyecto M24’. A finales de 1982 comenzó su fabricación, y en febrero de 1983 salió al mercado. Su primer motor fue un 983cc de 4 cilindros, pero posteriormente tuvo versiones mucho más potentes, llegando al culmen con el 1.9 del mito entre los mitos, el 205 GTi, que salió al mercado en 1984.
Además del éxito comercial para Peugeot –se vendieron más de cinco millones de Peugeot 205 en todo el mundo-, la industria francesa del motor se vio aliviada en una época un tanto dubitativa y este pequeño león se convirtió en un icono de la época. El eslogan “contigo al fin del mundo” se convirtió en uno de los más recordados de la historia de la publicidad, e incluso traspasó las fronteras para unirse a fantasías cinematográficas.
Buena parte de la responsabilidad de la gran popularización de este pequeño utilitario la tuvo el rotundo éxito de su versión deportiva. El mundo de los rallies resultó ser un paraíso para este pequeño pero robusto modelo, y enseguida llegaron los éxitos: dos campeonatos del mundo de rallies y dos París Dakar. Nombres como el de Ari Vatanen siempre serán asociados a las versiones Turbo 16 de más de 350 y 450 cvs, y la salida al mercado de la versión Rallye dio la oportunidad al gran público de sentir las prestaciones de un coche pensado para la competición, pero adaptado al uso diario.
España fue uno de los países donde mejor aceptación logró el Peugeot 205 y muchos lo sintieron como un vehículo propio. Y es que el 205 español, fabricado en la factoría de Villaverde (Madrid) tenía una particularidad. Dado que montaba un motor Simca/Talbot de mayor tamaño que el original francés, los ingenieros responsables de la fabricación del vehículo en España tuvieron que añadir un pequeño abombado al capó delantero. Esta pequeña diferencia, que no afectó en absoluto a las prestaciones del vehículo, gozó de un gran éxito y en 1985 fue nombrado Coche del Año en nuestro país.
Aunque dejó de fabricarse en 1998 para dar paso al Peugeot 206, es fácil encontrar muchos 205 por cualquier parte y en perfecto estado. La salida al mercado del Peugeot 208 no hace sino confirmar que esos genes del 205 no se han perdido, y que las nuevas generaciones tienen todo el derecho a disfrutar de un coche que hizo historia y que nos llevó al fin del mundo.
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